Para fijarlos momentáneamente, puedes pegar los elementos con una cinta adhesiva o ir pegando cada pieza con silicona líquida. Este tipo de pegamento no deteriora el cuero y, como no es de secado instantáneo, permite ir haciendo modificaciones.
Si la bolsa no es rígida, coloca una tabla delgada o un libro grande de tapa dura en el interior para tensar el cuero y facilitar el trabajo. Esto permitirá darle cuerpo y rigidez a la bolsa, permitiéndote ver la forma original y aprovechar el espacio mientras haces las manualidades paso a paso.