Saber cómo ser un buen padre consiste en tener principios que fomenten la cercanía y ayuden a construir una relación amorosa. Aquí comparto algunos puntos que considero importantes sobre cómo educar a los hijos para construir una relación afectiva y efectiva que trascienda el tiempo, al mismo tiempo que forjas una comunicación familiar sólida y gratificante para todos.

Fomentar el diálogo

No importa qué tan cansado regrese un padre del trabajo o de un viaje de negocios, siempre puede destinar algunos minutos para escuchar a su hijo y preguntarle cómo le fue en la escuela, qué aprendió y cómo se relaciona con sus maestros y amigos. La comunicación familiar es fundamental.

Conocer sus inquietudes, emociones y deseos le permitirá acercarse más a su pequeño e inculcarle valores como la confianza y la comunicación familiar. No tiene que ser una especie de “interrogatorio”, simplemente habla con ellos mientras realizas otras actividades en familia.

 

Leer un cuento a su lado

Que un padre les cuente su historia favorita a sus hijos todas las noches antes de dormir es una de las más bellas actividades en familia y permitirá que se genere un estrecho vínculo afectivo al tiempo que el niño desarrolla su imaginación y lenguaje. Un abrazo y un beso serán el broche perfecto para que tenga dulces sueños y se sienta más cerca que nunca de su papá.

Jugar con los hijos

Cómo ser un buen padre implica compartir momentos de ocio y diversión como parte de las actividades en familia. Rompecabezas, escondidillas, fútbol o ajedrez, etc. La lista es infinita.

Invertir todos los días un tiempo para no pensar en nada más que en pasarla bien juntos y conocerse mejor no tiene precio. El amor y la comunicación familiar es algo que no tiene sustitutos. Estos instantes se convertirán en las memorias más importantes del día de mañana, pues las actividades en familia más cotidianas traerán enseñanzas que perdurarán por siempre.

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Compartir pasatiempos

Desde practicar un deporte que les fascine hasta tocar el mismo instrumento, existen muchas formas de encontrar algo en común y tomarlo como el mejor pretexto para intercambiar puntos de vista y aprender el uno del otro.

Pasar tiempo juntos los fines de semana

Si entre semana, la jornada laboral impide que muchos padres le dediquen tiempo a sus hijos, es posible compensarlo durante los días de descanso. Pasear en el parque, disfrutar un helado, ver una película, ir a casa de los abuelos o hacer la tarea juntos son actividades que les permitirán conectar y crear un auténtico vínculo.

Aunque es cierto que cada uno debe descubrir cómo ser un buen padre y educar a los hijos, el amor, la dedicación y la paciencia son siempre los ingredientes básicos para ser un papá de calidad y cumplir con éxito este importante rol familiar.

Vale la pena compartir estos consejos con todos los papás, y también las mamás, que conozcas para que intercambiar los valores imprescindibles que debe tener un buen padre.